martes, 26 de enero de 2016

El Poder del Corazón 1

Sólo quiero terminar con el dolor; que la angustia termine.
Que esa presión en el pecho deje de aparecer de repente... que simplemente no aparezca más.

Sólo quisiera que hubiese una forma de terminar con todo eso. Alguna manera fácil...
Un sólo camino que me lleve a la libertad emocional; algo que me permita olvidar los malos sentimientos, los malos recuerdos. Una especie de filtro mental y emocional.

Mantener todos los sentimientos controlados, como si estuviesen gobernados por alguna consola.

Alguna especie de operación para extirpar el órgano que forja ese tipo de emociones...

Pero no hay; según tengo entendido, tal cosa no existe.
Como si fuese tan fácil deshacerse con un sólo click de todo el dolor, que por tanto tiempo me ha invadido... y que todavía lo hace. Todavía me asedia, me fastidia, me atormenta.
A veces no me permite seguir; interfiere con mi vida, no me permite formar nuevas relaciones sanas.
Siento que pierdo el control de mis emociones; ira y desdicha, tristeza, angustia, sentimientos de inutilidad, temor al futuro (gran, gran temor al futuro).
Pierdo el interés por cosas que me encantaban hacer.
No duermo bien o duermo mucho.
Y casi siempre, sin ganas de hacer absolutamente nada, sintiéndome cada vez peor y más inútil. Me sobreviene un dolor agudo y muy profundo en el pecho, o a veces en la cabeza, que me hace pensar que voy a morirme de tristeza...
En general, es un problema que no he aprendido a superar con facilidad.
Si bien, encuentro leves alivios para el dolor, son sólo eso: leves, momentáneos, temporales.


Hay días en los que me pregunto qué más puedo hacer... Y siento que ya no puedo más. Es entonces cuando me rindo, no hago nada, me tiro en la cama y duermo todo cuanto el cuerpo me lo permita.
 Pero la presión que siento en el cuerpo, se vuelve peor... se siente tan fuerte, que no me dan ganas de salir. Mi cuerpo se vuelve lento. Y veo como el tiempo pasa y aún no logro terminar la tarea que con tanta lentitud estaba haciendo.

Hoy fue un día de esos...

No creía que volvería a pasar. Pensaba que sólo serían momentos o episodios aislados.
Pero cada vez que pasa, lo razono más. Y me doy cuenta de que esto que siento, es real; no es un invento para llamar la atención, ni para perder el tiempo, ni ninguna excusa que creen que me estoy inventando.

Sin embargo, ya no sé cómo abordarla. He intentado ir hasta el extremo, yo sola; mejorar de cierta forma, pero siempre el camino que decidía tomar, era el erróneo.

¿Cómo poder elegir? ¿Qué se puede hacer?
Los síntomas que tengo, son sólo ramas de un gran árbol cuyas raíces o causas  desconozco... ¿Por dónde empezar a podar?
Yo no creo que existan problemas que tengan origen en una única causa. Normalmente es un conjunto de muchas causas. Y en este caso ¿Cuáles son? ¿Por dónde empiezo? Yo sólo quiero terminar.


viernes, 8 de enero de 2016

Equilibrio


La definición que encontramos en el diccionario sobre Equilibrio:

Estado de inmovilidad de un cuerpo sometido a dos o más fuerzas de la misma intensidad que actúan en sentido opuesto, por lo que se contrarrestan o anulan.

En el diario vivir, tenemos dos o más cuerpos de diferentes intensidades o fuerza. ¿Han oído hablar sobre los porcentajes o los gráficos de torta?
La representación gráfica permite establecer valores de fuerzas o puntos que no se han obtenido experimentalmente sino mediante la interpolación (lectura entre puntos) y la extrapolación (valores fuera del intervalo experimental)... A lo que voy con todo esto; Que los diferentes cuerpos o puntos de nuestra vida, no siempre tienen la misma intensidad o magnitud.

Imaginemos un gráfico de torta dividido con nuestros intereses, responsabilidades, tareas pendientes y propuestas a futuro (sean de trabajo, de matrimonio, de viajes, etc.)...Así es nuestra mente. O por lo menos así me imagino a la mía, dividida en muchas partes, con diferentes grados de magnitud. Hay ciertos asuntos más importantes que otros. Como por ejemplo la familia, o la salud. 

Me costó bastante poner en orden mi gráfico de torta cuando regresé de la misión. Digamos que durante últimos tres meses en la misión, mi gráfico de torta ya estaba bastante desorganizado por las muchas emociones que me invadían, diversos pensamientos confusos que no me dejaban avanzar tanto como yo quería... y bueno, millón de cosas en la cabeza de, hasta ese entonces, una futura retornada.
Y la actual retornada, hoy día, ya puede decir con más tranquilidad que antes, que ha mejorado mucho en ese aspecto, después de 3 meses y medio de haber regresado de Uruguay. 

No fue fácil encontrar el equilibrio. El gráfico de torta, si tiene más de dos elementos, no puede tener (cada punto) el mismo valor. No puede haber 50% de familia, 50% de preocupación por la salud, 50% trabajo, 50% emociones, 50% asignaciones o llamamientos, 50% de esto y 50% de aquello. No todo puede estar equilibrado de esa manera... si fuese así, sería un gráfico de 350% (por decir un número). Y las matemáticas no funcionan así. Si no, pregúntenle a mi padre, él es el experto en matemáticas. No yo.

Sin embargo, existe el equilibrio mental. No necesariamente funciona como lo describe la definición, en cuanto a que cada cuerpo deba tener la misma intensidad o magnitud para estar equilibrada (hablando en el caso de un gráfico de torta mental, dividido en muchos puntos en los cuales preocuparse). 

En palabras simples, les diré que antes le prestaba más atención a lo que menos le tenía que prestar atención. Es decir, dividí mal las prioridades. Calculé mal las proporciones. Tal vez debía darle un 30% de atención a aquello a lo cual le daba un 15%, y así con el resto de mi mente. 

Para ser breve en lo que escribo; algo que me ayudó muchísimo, fue hacer una rutina... Creía que debía tener un trabajo para empezar a tener una rutina nuevamente (Ya que la misión, está todo organizado por horarios). Pero lo que mi mente necesitaba, era tener "algo para hacer" y no necesariamente requería ser un trabajo, podía ser cualquier cosa. En mi caso, empecé a correr por las mañanas, llegar a casa y bañarme, preparar mi desayuno y leer las escrituras. Esa fue mi rutina y la seguí religiosamente hasta que conseguí trabajo gracias a mi papá. Ahora sigo esa rutina, exceptuando el salir a correr, ya que mi actividad física en mi trabajo es caminar y caminar. 
El trabajo te mantiene la mente ocupada, te nivela drásticamente tus prioridades. Aunque también depende de qué trabajo sea; todo es relativo.

No trates de darle prioridad a otras cosas que no tienen importancia, como impresionar a un chico, o subir las fotos que aún no has podido subir en Facebook, o quién sabe cuántos otros asuntos innecesarios podemos ponerle a nuestra mente y darles prioridad... Simplemente no lo hagan, o trabajen para darle menos importancia.

El equilibrio es muy importante; Yo soy una mujer que adora el equilibrio, la organización y el orden, a pesar de que el desorden de mi cuarto no lo demuestre.
Me gusta tener bajo control cualquier situación que se me presente, y eso requiere de equilibrio mental. Por eso me resultaba tan frustrante no poder encontrar ese equilibrio que tanto deseaba. Pero con esfuerzo,  trabajo arduo, humildad y mucha, MUCHA paciencia, se logra.

sábado, 2 de enero de 2016

Año Nuevo, Vida Nueva








Esa frase popular parece extenderse por todo el mundo, en diferentes idiomas, para diferentes personas, aplicada en diferentes situaciones y sentidos... Pero tan adaptable a todos.
En mi caso, comenzó ayer, primero de enero del 2016.
Se respiraba un aire diferente; Hasta mis pensamientos eran distintos. Pero no es que haya ocurrido algo mágico que lo cambió todo. 
El sólo hecho de que cada persona en el mundo esté de acuerdo en que el comienzo de un Nuevo Año sea algo así como un doblez de página de su vida, una nueva oportunidad, entonces eso hace que todo se sienta diferente.

Y a pesar de ser 2 de enero, la euforia o el éxtasis de "un nuevo comienzo" sigue estando presente. Por tanto, para inaugurar el año 2016, decidí volver a escribir. Hace tiempo que me vienen rondando ideas en la cabeza, pensamientos, y un sentimiento de seguridad que me impulsa a escribir... ¿Sobre qué? nada específico. Sólo escribir, seguir el impulso. Tal vez lo llamen "ensayos"; yo lo llamo "Inspiración" ...O (por ahora) como el título del blog: REFLETION (Reflexión).

Ya sé que cualquier tipo de cambio es difícil. En sí, cambiar algo (ya sean costumbres, tradiciones, hábitos, o cómo quieran llamarles) nunca fue fácil.
Es más, el mes pasado comencé a correr por las mañanas... No todos los días, pero sí bastante seguido. También comencé a trabajar. No es un gran trabajo, pero me gusta y gano mi propio dinero.
Aún quedan muchas cosas por cambiar, por acomodar, limpiar y seguir acomodando. Hablando de mi vida, por supuesto. Pero estoy plenamente convencida de que, cada cambio, es una experiencia gratificante y buena, por más que sea difícil o no sea de nuestro agrado. El cambio siempre es para mejorar. De eso no lo dudo.

Definitivamente éste año (y este blog) comenzó con una ola de optimismo repentino que me gusta muchísimo, y quiero aprovecharlo y explotarlo lo más que pueda.

Gracias por participar leyendo esta primera entrada!!